Seis personas trabajan en la cooperativa, que envasa unos 100.000 kilos de miel por campaña
Erica Miel lleva tres décadas ayudando a dar salida a la producción apícola de los abejeros y abejeras de Galicia y en este tiempo se ha convertido en una pieza fundamental tanto para la venta directa de la miel gallega como para su comercialización a través de otros canales.
La cooperativa nació en el año 1990 por la iniciativa de un pequeño grupo de apicultores integrados en la Asociación Gallega de Apicultura (AGA) que, convencidos de la extraordinaria calidad de sus productos apícolas, buscaron juntos la mejor vía para hacerlos llegar al consumidor. En esos comienzos la aportación de los conocimientos y el esfuerzo personal de los socios fue determinante para el éxito del proyecto.
Con sede e instalaciones de envasado en Arzúa, está integrada por más de 250 socios y socias de toda Galicia y da trabajo a 6 personas
La capacidad ilusionante de aquella iniciativa colectiva, el trabajo y la constancia desembocan hoy en una cooperativa integrada por más de 250 socios que da empleo a seis personas y vende sus productos desde el ámbito autonómico al internacional.
600 metros cuadrados dedicados a envasado, formación y museo
De todas las socias y socios de Erica Miel, en la actualidad más de un centenar de apicultoras y apicultores comercializan cada año unos 100.000 kilos de miel, que salen al mercado envasados como miel multifloral y monofloral y que se distribuyen en todo el mundo.
La sede de la cooperativa, junto con la de la Asociación Gallega de Apicultura, está en Arzúa, en el Centro del Queso y de la Miel. En estas instalaciones, que ocupan una superficie de 600 metros cuadrados, además de la planta de envasado, hay una tienda con una amplia oferta de productos apícolas, un espacio museográfico y un aula de formación, que se convierte en el punto de encuentro y de referencia tanto para la formación como para la innovación apícola, puesto que a lo largo del año se desarrollan aquí distintos actos divulgativos, jornadas formativas y juntas.
A través de Erica Miel un centenar de apicultores venden sus productos, llegando con ellos desde el ámbito autonómico al internacional
A nivel autonómico, a mayores del concurso anual para envasadores, organizado por la Consellería de Medio Rural y la IGP Mel de Galicia, la Asociación Gallega de Apicultura organiza otro para productores, que busca las Mieles 5 Estrellas como una manera de prestigiar las mieles gallegas.
IGP Mel de Galicia
Erica Miel envasa una marca propia con la contraetiqueta de la IGP Mel de Galicia. Esta Indicación Geográfica Protegida es una marca de calidad y origen a nivel europeo que diferencia las mieles producidas en la comunidad de otras importadas y de menor calidad que, valiéndose de un etiquetado confuso, se pueden encontrar en el mercado.
Al margen de eso, Erica Miel también les proporciona el servicio de etiquetado a personas asociadas a AGA con la marca colectiva Das miñas abellas, para su uso conforte a la normativa de producción primaria. El proceso en las instalaciones de la cooperativa en Arzúa pasa por distintas etapas: control de calidad, trazabilidad, clasificación, envasado y etiquetado. El departamento de calidad realiza la toma de muestras para la analítica del producto llegado a la cooperativa desde los distintos productores para de este modo garantizar y certificar su calidad y trazabilidad.
Productores de toda Galicia integrados en AGA etiquetan y comercializan su miel bajo la marca colectiva ‘De mis abejas’
En Europa se importa más del 50% de la miel consumida, siendo mieles de bajo precio que proviene de países lejanos como China, Turquía o Suramérica. Son mieles industriales sometidos a altas temperaturas en su envasado para que se mantengan en estado líquido, lo que provoca la pérdida de sus propiedades biológicas y terapéuticas. Su calidad es muy inferior a la de la miel gallega, pero resulta difícil de identificar para los consumidores debido a un etiquetado poco claro a nivel de la Unión Europea.
Tantas mieles como flores
Cada miel es particular, y las hay para todos los gustos, incluso para los que no gustan de golosinas dulces. Dentro de Galicia existen mieles con características muy diferenciadas en colores, aromas y sabores. En función de su tipología, la miel es clasificada como monofloral o multifloral para su envasado y comercialización.
No existe una única miel, sino tantas como plantas hay y como combinaciones posibles pueden confluir entre ellas. Es una gama infinita de colores, aromas y sabores
Las mieles multiflorais representan la tradición apícola de Galicia y son tan numerosas y diversas como posibilidades de combinaciones florísticas hay, pues cada comarca, cada valle, cada paisaje ofrece su propia miel. Es una miel dulce con notas saladas, amargas o ácidas, dependiendo de las floraciones más abundantes en el entorno de las abejas, pues se trata de una mezcla de mieles con variado origen floral: castaño, eucalipto, zarza, brezo y otras flores de monte.
La producción de miel monofloral resulta posible cuando hay una especie botánica predominante y de sobra presente en el entorno del apiario. Dentro de la IGP Miel de Galicia están reconocidas cinco variedades monoflorales: castaño, brezo, eucalipto, zarza y mielato de roble. El valor de la miel monofloral es superior debido a la unicidad de sus características, de su composición y a menudo también de su rareza. Producir y envasar mieles monoflorales, mielatos, mieles de paisaje (parques naturales, reservas de la bioesfera) o mieles de producción ecológica son una demanda que buscan cada vez más consumidores.
El nombre de la cooperativa es un reconocimiento a la erica (brezo), la planta melífera gallega por excelencia
El nombre de la cooperativa es un reconocimiento a la erica (brezo), la planta melífera gallega por excelencia. Está muy extendida por los montes de la comunidad y, desde tiempos inmemoriales, es la fuente más generosa de las mieles oscuras de Galicia, que tanta fama alcanzan al otro lado de sus fronteras. A sus colores característicos, que van desde el blanco de la variedad arbórea hasta lo violeta de la cinérea, llenan de viveza las zonas silvestres dónde florecen.
Productos para la salud
La I+D+i aplicada a la apicultura permite obtener, además de miel, otros productos y derivados, como la miel crema, el polen, los propóleos o la jalea real, así como aplicaciones en bebidas, cosmética y apiterapia, que son posibilidades que dan más valor a los productos de las abejas.
Además de distintos tipos de miel, Erica Miel también elabora y comercializa toda una línea de productos I+D (miel crema, polen y derivados) con buena demanda por aquellas personas y consumidores que confían en las propiedades terapéuticas de los productos de las abejas.
En este año de pandemia la sociedad volvió a valorar los productos sanos y naturales producidos por las abejas a partir de las flores de plantas silvestres que abundan por toda Galicia
De hecho, durante los primeros meses de confinamiento hubo un aumento de la demanda de miel y otros derivados apícolas, que los productores gallegos supieron atender para el disfrute de aquellas personas que cuidan su alimentación y su salud. En todas las culturas se le atribuyen a la miel valores simbólicos y terapéuticos, constatados en la actualidad por la ciencia.
Propiedades
La miel, gracias a sus características, es un alimento natural sin manipulación ni empleo de aditivos que favorece la buena salud. En todos los casos, el consumo de miel en el hogar en vez de azúcar es lo más recomendable. La miel hace nuestra alimentación más equilibrada y sana. Es un alimento energético que suministra al organismo de calorías rápidamente asimilables, útiles para la práctica física y para el trabajo intelectual. Es muy adecuada para personas mayores, débiles o enfermas.
El consumo habitual de miel mejora mucho el valor dietético de nuestra alimentación al sustituir en todos los casos el azúcar por la miel, además de sus propiedades antibacterianas y antioxidantes
La miel está dotada de propiedades emolientes y edulcorante, moderadamente laxativas y antitusivas. Presenta una actividad antibacteriana, útil en el caso de enfermedades debidas a resfriados y gripes, así como para irritaciones de garganta, y para usos externos en quemaduras, llagas y heridas.
La actividad bacteriostática viene de un encima de la miel que origina agua osixenada y que inhíbe el crecimiento de bacterias, mientras que su actividad antioxidante viene marcada por el porcentaje de propóleos que haya en la miel (los propóleos multiplican por 40 o 50 el valor antioxidante de la miel).